Confirmación de asistencia: ¡no dejes esperando a los novios!

Desde que llega la tarjeta de matrimonio, familiares o amigos están deseosos de que se acompañe a la pareja como testigos de esta bella aventura que comenzó con la entrega del anillo de compromiso, pero no siempre habrá disponibilidad, el ánimo o el tiempo para asistir a la boda y es entonces, cuando se presenta el dilema de cómo rechazar la invitación de forma respetuosa y con cariño. No importa si es porque no estarás en la ciudad, si hay algún compromiso previo en la agenda o si simplemente no quieres pensar en algún gasto sobre el vestido de fiesta, encuentra la mejor manera de comunicar tú inasistencia y sobre todo no caigas en los errores comunes que comentaremos a continuación y que son el dolor de cabeza de algunos novios.

No le restes importancia

Nuestro primer consejo es que no lo hagas por impulso, ni por algún capricho como que no te gustó el diseño de la tarjeta de invitación o tu nombre no estaba escrito de la manera correcta. Recuerda siempre que la celebración de un matrimonio es un momento muy especial y la pareja tomó mucho tiempo en depurar su lista de invitados. Piensa en tu cercanía con los novios y en las repercusiones que tendrá para ti el no asistir. Si definitivamente no puedes o no quieres acompañarlos, no dejes de comunicarles que no irás.

Hazlo con tiempo

Si no puedes asistir a la boda, lo mejor es que lo comuniques con tiempo, como mínimo una o dos semanas antes. Esto ayudará a los novios a tener claros los detalles de logística, la acomodación de los invitados, ordenar de nuevo los nombres del seating plan que hará parte de la decoración del salón para matrimonio, el avisar será una muestra del respeto e importancia que le das a la celebración.

Del mismo modo

Elige la misma manera en que ellos te hicieron llegar la invitación para comunicarles que no asistirás. Es decir, si te enviaron por correo postal envía de vuelta una tarjeta, si fue por correo electrónico redacta un mail o señálalo en la opción que tienen para ello la web de matrimonio, que son la opción de tarjetas de matrimonio modernas. Si fue en persona devuelve la visita. Recuerda siempre expresar tu agradecimiento por la invitación y el pesar por no poder acompañarlos.

Explicaciones sin mucho detalle

Aunque lo importante es comunicar a los novios que no podrás asistir al matrimonio y en general nadie va a preguntarte mucho más, hay casos -en especial con familiares y amigos muy allegados- en los que es bueno tener una razón clara para contarles. Exprésales si en tu caso interfiere con un viaje o un compromiso previo. Si definitivamente lo que te inhibe de acompañarlos es el simple deseo de no estar, diles que tienes motivos personales y no trates de extenderte.

No olvides el regalo

El que no asistas al matrimonio no te exime de tener un detalle apropiado con los contrayentes, este no debe ser del mismo costo que si los hubieras acompañado, pero si es un gesto que recordarán siempre. Intenta además dedicarles algunas palabras o encontrar una tarjeta con frases de amor cortas que sirvan para la ocasión. En especial si la pareja es muy cercana a ti el regalo puede ir acompañado de una invitación a comer o una botella de vino para celebrar con un brindis.

No cambies de opinión a último minuto

A no ser que se trate de algún familiar muy cercano o de amigos de mucha confianza, si ya confirmaste tu inasistencia, no llames a última hora a decir que finalmente si irás. Esto causará mucho estrés a la pareja que ya tiene calculado el banquete, los centros de mesa para bodas y la distribución en el salón.

Nunca jamás

Si no puedes acompañar a los novios y tuviste en cuenta los pasos anteriores, avisando que no asistirás, bajo ningún concepto aparezcas en el matrimonio sin que nadie sepa vas a ir. Es un gesto de mal gusto, pues la pareja ya no contaba con tu presencia y eso los puede hacer sentir incómodos. Recuerda que es un día muy importante para ellos y lo único que quieren es estar felices y tranquilos.

Aunque haga parte de un protocolo social, confirmar tu asistencia o la ausencia en una boda es una muestra de respeto de cariño profundo a los contrayentes que han preparado con todo amor cada detalle de la ceremonia como la decoración de matrimonio, para hacer del momento en que intercambien sus argollas de matrimonio el más memorable.