Pareja extranjera: guía básica para organizar una ceremonia bilingüe
Si alguno de los dos es extranjero y hablan idiomas diferentes, hoy queremos compartirles consejos clave para su matrimonio bilingüe y que ninguno de sus invitados se pierda detalle de la celebración.
Luego de formalizar su unión con la entrega del anillo de compromiso, es el momento de comenzar a planificar todos los detalles de su boda. Pero antes de tomar decisiones sobre el estilo de la decoración para matrimonio, y pensar el lugar que les gustaría para pasar su luna de miel, es preciso que tengan claro cómo desarrollar su celebración. Y más aún, si uno de los dos es extranjero. Siendo esto así, queremos compartirles una guía práctica sobre cómo organizar una ceremonia bilingüe, para que no se les convierta en un dolor de cabeza porque no saben por dónde comenzar.
El idioma principal para la ceremonia
Podrán basar la elección de acuerdo a las siguientes situaciones: según el idioma en el que se comunican; cuántos invitados hablan más una lengua que otra; o según el lugar donde se celebrará. Pensar también con cuál se sienten más cómodos y en confianza.
Las invitaciones
Cuando elijan el diseño de tarjetas de invitación y lo envíen a la imprenta, o si prefirieron las virtuales, asegúrense que contenga la información de su enlace en las dos lenguas. O si su presupuesto se los permite dividan cuántos son extranjeros y cuántos locales, de esta manera podrán tener invitaciones en sus respectivos idiomas.
Elegir cuándo incorporar el otro idioma
No solo para el momento del intercambio de votos o el de las argollas de matrimonio necesitan saber en qué idioma hacerlo. Habrá ocasiones y/o actividades que demandan interacción con los invitados que vale la pena que consideren, como, por ejemplo, el brindis. No obstante, solo ustedes sabrán cuáles serán esos instantes en los que desean incorporar el otro idioma para que todos entiendan lo que está pasando.
El oficiante
Las exigencias de la globalización han tomado posición hasta en los centros religiosos. Por eso, aunque suene poco común, vale la pena encontrar un sacerdote u oficiante de ceremonia bilingüe, para darle mayor comodidad tanto a los invitados como a ustedes. Una alternativa es contratar a un traductor o mediador de ceremonia, que traduzca por turnos de intervención al oficiante o traduciendo frases representativas, como “los declaro marido y mujer” o “puede besar a la novia”.
Ahora bien, una idea más más actualizada, y de hecho óptima, es la de contratar la tecnología de traducción simultánea, donde se le entrega a cada asistente un audífono especial que se conecta a una cabina de audio, desde la cual una persona estará traduciendo en vivo lo que el oficiante va diciendo. De esta forma, todos reciben el mensaje en su idioma. Tal vez demande una inversión adicional, pero garantizará en mayor porcentaje la comodidad de todos y el normal desarrollo de la boda.
Los votos: diversidad cultural
No se queden solo en el idioma. Para hacer ceremonias bilingües también se tiene en cuenta la multiculturalidad. En la decoración de iglesia para matrimonio, pueden combinar costumbres para hacer una ceremonia más original, propia de ustedes dos. Pronunciar sus votos o algunas frases de amor cortas típicas en su lengua natal, hará más romántico el momento. Si lo desean pueden incluirnos en el programa de la ceremonia para que ningún asistente pierda detalle.
Ritos simbólicos
Agregar una tradición simbólica en la lista de actividades de la boda, como la ceremonia de arena, cruzar las copas para beber vino de la copa de su conyugue, o romperlas con el pie acompañado de un “¡mazel tov!” al aire que cierre el ritual. Son algunas ideas que pueden ser aprovechadas de la cultura de la pareja extranjera que tal vez algunos invitados no conocen. Hasta una serenata o baile típico como espectáculo de la noche para la recepción, puede ser tenido en cuenta. Instantes para compartir y fortalecer los lazos familiares.
La decoración
Usar una decoración de salón para matrimonio bicultural, también es una excelente forma de incluir tradiciones biculturales de ambas nacionalidades celebradas. Los elementos decorativos pueden también usar cartografía, símbolos patrios o representativos o color de ambos países de los contrayentes, como una forma de darle su sello personal a la boda, muy especial de aludir al extranjerismo manejado en la celebración. Adicionalmente, las bodas bilingües suelen tener carteles de bienvenida o de señalización con textos en los dos idiomas, cosa que todos los invitados tengan un mismo punto de guía y se sientan parte de la ceremonia, muy bien atendidos. Aquellas personas que han viajado al extranjero saben que llegar a un sitio donde tengan carteles con letreros bilingües son apreciados, así que ténganlo en cuenta para su celebración.
Como pueden ver las bodas bilingües son más sencillas de lo que suelen hablar de ellas. Es comprensible esa predisposición, ya que un matrimonio de por sí exige un alto grado de dedicación y planeación. Estamos convencidos de que el suyo será inolvidable. Y no solo por su estilismo nupcial, luciendo el vestido de novia y traje de novio, sino porque sus culturas estarán representadas de principio a fin en su celebración.