9 consejos prácticos para acertar con el menú de boda

Querrán sorprender con la decoración para matrimonio, deleitar a los invitados y, por supuesto, disfrutar de una comida deliciosa en presentación impecable. No en vano es el menú más importante de su vida y el primero que compartirán como esposos después de intercambiar sus argollas de matrimonio frente al altar acompañados de todos sus seres queridos.

La elección del menú es tan importante como la del estilo de las tarjetas de matrimonio, sin embargo, no tiene por qué ser una tarea difícil o estresante basta seguir algunos consejos que les ayudarán a acertar con los sabores y texturas, incluir el gusto de ambos e incluso divertirse.

1. Tipo y horario de la boda

Lo primero a considerar es el estilo de celebración que quieren, y la hora en que van a realizarlo. Esto les permitirá dar una línea base al menú. Así, si la celebración es un matrimonio campestre e íntimo pueden optar por una serie de pasabocas que salten entre muchos sabores y si la boda es en la noche y muy formal deben pensar en un plato servido en la mesa con cuatro momentos, incluyendo entrada y postre.

De igual manera según el horario deben tener claro qué puede ofrecerse:

• Desayuno va entre las 9 a.m. y las 11:30 a.m.
• Almuerzo entre las 12:30 y las 3 p.m.
• Brindis, cóctel y pasabocas entre las 4 p.m. y las 6 p.m.
• Cena a partir de las 7 de la noche

En las bodas que se extienden pasando la medianoche, se acostumbra además ofrecer alguna comida ligera como un consomé o algo de comida rápida, al cerrar la fiesta.

2. Presupuesto

Ofrecer una deliciosa comida no tiene por qué ser un punto que eleve desmesuradamente el costo de la celebración. Por esto es importante tener una idea y cantidad clara de lo que se tiene disponible para este rubro tanto en comida como en bebidas. Lo mejor es hacer la cuenta por persona y a partir de ahí definir si es un menú de varios platos, si es plato único, tipo bufé o mesa de pasabocas.

3. Número de invitados

Es importante el número de personas a quienes decidan enviarle el modelo de tarjetas de invitación, porque define además la logística al momento de servir y permite decidirse entre tener disponibles meseros para cada mesa o presentar la comida en forma de bufé. Ayuda también en la elección de platos que sean servidos como debe ser considerando el tiempo que tardarán en presentarse en la mesa.

4. Servicio de catering

Teniendo en cuenta el tipo de celebración, el presupuesto y el número de invitados, la tarea de contratar el servicio de comidas que se ajuste a las necesidades será más sencillo. Como al contratar cualquier proveedor, la elección del catering debe hacerse cuidadosamente siguiendo recomendaciones, entrevistándose directamente y obviamente pidiendo un menú de prueba de todo lo que quieren ofrecer en la boda.

Es importante verificar que tengan la capacidad disponible para el tamaño de la fiesta y que sean flexibles y muy cuidadosos al momento de requerir platos especiales por alergias, invitados veganos o porque se quiera incluir una receta de tradición familiar.

5. Peticiones especiales

La idea es que en la boda todos puedan disfrutar a plenitud de la fiesta y por supuesto del banquete. Para esto es importante verificar con los invitados, en especial con los que no son tan cercanos como compañeros de oficina, colegas de estudio o familiares con los que no se comparte hace mucho, si alguno tiene restricciones de dieta. Es importante que no traten de ajustar el menú a los gustos particulares de cada uno, sino simplemente tener opciones para aquellos que tienen alguna limitación alimenticia por salud o creencias.

6. Para todos los gustos

Tener platos variados o con diversas opciones les da la posibilidad no solo de que se vea bien por la combinación de formas, colores y texturas, sino de dar en el gusto de la mayoría de los invitados con una amplia paleta de sabores. Tener bebidas fuertes y ligeras, considerar un par de elecciones de proteína, variedad de verduras o diversos postres hará que cada persona que los acompañe encuentre algo que lo deleite y pueda disfrutar de lo que con tanto amor han preparado para ofrecer.

7. Ponerle su sello

Es su día y sin importar si prefieren una decoración de matrimonio sencillo, todo debe reflejar su estilo, gusto y la inmensa felicidad de compartir con familiares y amigos el amor que los envuelve. Así que porqué no arriesgarse con un menú que tenga su personalidad.

Incluir la receta favorita de ambos o el plato que compartieron la primera cita, hacerle honores a la abuela preparando su especialidad o elegir un menú típico de la región de origen de las familias hará que la celebración tenga un tinte verdaderamente diferenciador y muy emotivo.

8. Prueba del banquete

No importa que tan recomendado esté el servicio de comida o restaurante que atenderá su fiesta o si las pruebas que les dieron al momento de contratarlo estaban deliciosas, la prueba del bufé es un momento del que no pueden prescindir. Conviértanlo en una ocasión especial para compartir junto a sus padres. Pueden también incluir hermanos, pero la recomendación es realizarlo con un círculo íntimo. Tener una segunda opinión, en especial de las personas que los quieren es siempre valiosa. Programarlo con anticipación para tener tiempo de realizar ajustes si se requieren.

9. Última revisión

Luego de la prueba del banquete y de las opiniones de quienes los acompañaron, tómense el tiempo para comentar sobre el menú propuesto. Pregúntense qué fue lo que más les gustó, si algo les disgustó, si sintieron armonía en los sabores. No sientan temor de ajustar los platos cuantas veces sea necesario hasta que ustedes como anfitriones y protagonistas de su gran día estén totalmente satisfechos con la elección y seguros de que van a consentir su paladar y el de los invitados a su boda.

Ya con el menú seleccionado y después de pasar todas las pruebas, deberán programa la visita a la agencia de viajes para revisar que todos los pormenores de la luna de miel se encuentren al día, no querrán modificaciones de último momento en el itinerario de su paquete de luna de miel.