Las 6 cosas que las damas de honor necesitan que como novia sepas

Luego de compartir contigo la noticia de la entrega del anillo de compromiso y los próximos planes de boda, seguro que las familiares y amigas cercanas que elijas de damas de honor estarán felices de compartir de cerca tu alegría y probándose el vestido de fiesta que hayas definido para la corte. En ellas encontrarás apoyo para varias de las tareas que tendrás que realizar en los próximos meses, tendrás una opinión sincera respecto a tu vestido o los elementos de la decoración para matrimonio y grandes aliadas al momento de querer relajarse y conversar entre amigas. No obstante, es muy importante que tengas claro que son eso amigas y que no puedes confundirlas con proveedores o con un equipo especialista en planificación de matrimonio.

Te contamos los seis errores más frecuentes en los que puedes caer como novia y que tus damas de honor mueren por contarte.

Son amigas no psicólogas

Aunque seguro tienen una relación entrañable de muchos años o han compartido contigo la vida, en el caso de tus hermanas, tus damas de honor no están capacitadas para resolver los problemas sentimentales que el estrés o discusiones insignificantes por el color de los centros de mesa para bodas puedan causar entre tú y tu prometido. Mantenlas alejadas de los conflictos de pareja y prefiere pasar con ellas un rato relajante y divertido.

De ningún modo intervienen en asuntos familiares

Lo mismo pasa con los familiares o allegados. No pidas a tus damas de honor que hagan esa llamada incómoda o medien ante tu familia en alguna situación conflictiva. Ninguna de ellas debe hablar por ti y menos para resolver alguna aspereza.

Están para apoyarte

Claro, tus damas de honor, en especial si son varias, pueden ayudarte con labores pequeñas como entregar las tarjetas de matrimonio modernas, llamar a algunos invitados que no han confirmado o recordarte todos los detalles de tu ajuar, pero sería un error tratarlas como asistentes y pedirles que hagan tareas como confirmar tu cita a la peluquería o recoger tu vestido de novia con manga en la tienda.

También tienen ocupaciones

Es verdad que la emoción puede hacer que quieras compartir con tus damas cada detalle del matrimonio, que ya elegiste el vestido de novia sencillo que estabas buscando, que encontraste el fotógrafo o el chef, pero esto no quiere decir que tienes comunicación ilimitada con tus damas. Ten presente sus ocupaciones y horarios de trabajo y no pretendas que estén disponibles en el celular, el correo o tu casa 24/7.

Imposible que te sustituyan

Aunque parece innecesario aclararlo, es bueno que recuerdes que las damas de honor no pueden relevarte a ti o a tu pareja en las tareas que juntos deben realizar. Esto es llevar sus papeles a la notaría o la parroquia, recoger las argollas de matrimonio, seleccionar las frases de amor cortas para los votos o para el discurso de agradecimiento y menos tomar en su nombre el curso prematrimonial.

“La novia soy yo”

Es verdad que tú eres la protagonista en tu día y que las damas de honor están comprometidas con que todo salga bien y la pases de lo mejor. Pero ser la novia no es excusa para exigirles que estén pendientes de ti y cumpliendo tus deseos o caprichos durante toda la celebración. Recuerda que ellas también son invitadas y quieren divertirse contigo.

Estas seis recomendaciones harán que tu relación con tus damas de honor se estreche y se haga aún más especial durante el proceso de organización de la boda. Recuerda elegir para ellas vestidos de cóctel que se acomoden a los diversos tipos de siluetas e incluir una nota de agradecimiento en su tarjeta de matrimonio.