‘Slow wedding’: una filosofía para vivir el matrimonio sin estrés

Con la entrega del anillo de compromiso comienza una etapa de muchas decisiones, visita a distintos lugares hasta encontrar el escenario de la celebración, definir la decoración para matrimonio, elegir el traje de novio y el vestido de novia. Pero no siempre la planeación de la boda debe suponer dolores de cabeza y maratones contrarreloj, la filosofía Slow wedding, pretende precisamente que como pareja se disfruten esta fase con tranquilidad y hagan de su celebración un evento libre de protocolo, que dibuje su personalidad y sientan que la vivieron a plenitud.

¿De qué se trata este concepto?

Es más que un tipo de ceremonia o de decoración de iglesia para matrimonio, es una filosofía que exalta el volver a saborear cada instante, teniendo como premisa la sencillez y naturalidad, aunque esto haga que la boda no se ciña estrictamente a ningún protocolo. La idea es que disfruten tanto el evento como su preparación, porque todo se decide desde el gusto y el corazón de ambos.

Una pareja slow

Esta “tendencia” que ya lleva algunos años en la paleta de opciones del universo nupcial, es ideal para quienes buscan un estilo tranquilo, sosegado y muy natural, convirtiendo su matrimonio en un evento más espontáneo y sin acartonamientos. Por esto, el ajuar también se decanta por un traje y vestido de novia sencillo, atuendos cómodos con líneas sueltas tanto para ella como para él, maquillaje tenue y accesorios muy naturales como flores silvestres.

Una filosofía contracorriente

Esta forma de vivir el matrimonio va en contravía de las más pretenciosas o multitudinarias en las que hay un inmenso salón de fiesta y 200 invitados, por el contrario suele moverse más bien hacia matrimonios al aire libre, en el campo o en medio de la playa. Es una celebración que va al ritmo de pareja, en la que todo sucederá como ustedes quieren.

Un banquete inspirado en productos orgánicos

Este tipo de boda se celebra generalmente en presencia de la familia y algunos pocos amigos cercanos, con la intención de que realmente todos puedan compartir. Prefieran un plato elaborado con productos orgánicos y locales que sea de todo su gusto, puede ser una receta familiar, planear un asado, poner varias mesas distribuidas con pasabocas autóctonos o instalar food truck y una estación de cócteles que se encarguen de las bebidas y la alimentación durante todo el evento.

Una decoración para matrimonio sencilla

Continuando con la línea del vestuario, la decoración para este tipo de bodas tiende hacia el aprovechamiento del entorno o del lugar que elijan, en especial si es un matrimonio campestre. Incluye elementos sencillos, mobiliario de madera, sin más adornos que plantas, jarrones con flores, follaje u hojas y mucha cercanía con la decoración vintage de boda aportando un toque rústico y acogedor.

La compañía es lo más importante

Tratándose de una celebración a la que quieren dar un ambiente más cercano y acogedor, eviten invitados por compromiso y decídanse solo por las personas cercanas a su corazón. Déjenles claro que será una boda con menos protocolo para que se vistan acorde y puedan disfrutar de la fiesta, compartir desinhibidamente o incluso sentarse en la grama si así lo han dispuesto.

Recuerden que el principio de la filosofía slow wedding es que, desde la elección de las tarjetas de matrimonio hasta que salgan rumbo al lugar que definieron para su luna de miel, toda la celebración sea un reflejo de su personalidad y que disfruten cada segundo.