Dormir juntos la noche antes del día del matrimonio: ¿sí o no?
¿Qué hacer la noche previa a la boda? Algunas parejas prefieren pasarla juntos y otros por separado. Es un tema en el que no se piensa al momento de iniciar los preparativos, pero tarde o temprano surge. Aquí podrán descubrir ambas posibilidades.
La víspera a la fecha marcada en el calendario, estará llena de recordatorios para confirmar que cada detalle se cumpla como lo han programado. Que no falte ninguna de las argollas de matrimonio; último repaso a las frases de amor que harán parte de los votos; o que el vestido y el traje tienen los ajustes pertinentes y a tiempo. Sin embargo, existe una situación que, si bien no hace parte de las tareas de planificación, sí tiene que ver con las tradiciones y costumbres como lo es pasar o no la noche juntos antes del matrimonio. A continuación, les explicamos las posibilidades para que los ayude a definir qué harán en su caso guiados por sus intereses y preferencias.
Siguiendo la tradición, dormir separados
Cada situación en la vida tendrá siempre dos perspectivas, y respecto a la noche previa a la boda, no es la excepción. Las opiniones están divididas, sin embargo, ninguna anula a la otra. Por lo que, si les gusta guardar las tradiciones y es lo que va con su personalidad, no sientan la presión de seguir la modernidad, sean fieles a sus principios y convicciones para que se sientan totalmente a gusto con lo que decidan.
- Puede ser una oportunidad para mantener la chispa encendida, conservar el romanticismo de antaño típico de las novelas más clásicas, donde ambos contrayentes se toman el espacio de prepararse de la mejor forma para acudir al encuentro de la pareja.
- Por otro lado, si dan valor a los rituales y/o agüeros antes de la celebración como la de llevar algo nuevo, viejo, algo prestado y algo azul, o la de que el novio no puede verla luciendo su vestido de novia sencillo, porque no quieren que ese día esté rodeado de esas energías, entonces prefieran compartir por separado la última noche y esperen un nuevo amanecer para despertar juntos, pero ya oficialmente como 'marido y mujer'.
- Los que prefieren el último día oficialmente como solteros, tendrán la alternativa de compartir con sus familiares; terminar detalles sobre la decoración de salón para matrimonio o sorpresas en caso de que las haya, tener un espacio de recogimiento y reflexión para llegar al altar libre de preocupaciones.
A favor de dormir juntos
Para las parejas que conviven bajo un mismo techo, esta alternativa se convierte en una oportunidad para compartir sentimientos y emociones previas al gran día. Podrán reconfortarse mutuamente, relajarse, y si son de espíritu menos tradicional hasta organizar su propia despedida de soltería.
- Otra de las apuestas para decidir pasar la noche juntos, tienen que ver con el tema de organización. Al estar en el mismo lugar donde realizarán la recepción: hotel o hacienda, contarán con todo lo que necesitan para sus preparativos. De igual modo, el profesional de fotografía no tendrá que realizar una tarea maratónica para desplazarse hasta donde ustedes se encuentren. Incluso, pueden solicitarle realizar su first look antes de ingresar a la ceremonia.
- Aun pasando la noche juntos, podrán guardar un poco de misticismo con respecto a las tradiciones mencionadas anteriormente. Dense el primer beso de buenos días, regálense unas frases de novios matutinas y comiencen el día lleno de energía positiva para que disfruten del momento.
Ya conocen cuáles son algunos de los argumentos más relevantes para cada una de las alternativas, ahora a decidir. Recuerden que finalmente lo más importante en cualquiera de los escenarios, es que ustedes se sientan totalmente a gusto con la decisión tanto la noche previa al matrimonio, como la posterior a ella en la luna de miel, y todas las que vendrán.