Ramo de novia: ¿qué hacer con él después de la boda?
¿No sabes qué hacer con el ramo de novia después del matrimonio? Te dejamos 7 propuestas hermosas, emotivas y útiles para darle uso a este bellísimo complemento de tu estilismo nupcial, luego del “sí, quiero”. Y decide cuál de estas prefieres tú.
El ramo de novia es uno de los accesorios más bonitos y mejor cuidados de todos los complementos que redondean tu atuendo nupcial. Las flores que lo componen son seguramente tus favoritas y las has elegido con cuidado para que vayan en combinación perfecta con tu vestido de novia y creen un conjunto armónico con la decoración para matrimonio que lleva semanas en preparación. Por esto, muchas novias se debaten entre regalar su yugo, como se conoce en Colombia, y darle la suerte de encontrar el amor de su vida a una de sus invitadas solteras o conservarlo como un recuerdo muy especial al lado de las fotografías y una de las tarjetas de matrimonio, para completar el álbum del gran día. Te traemos diversas opciones de qué hacer con el ramo de novia luego de lucirlo en tu día B. ¡Tú escoges!
1. Uno similar
Si esas amigas o familiares que fueron tu verdadero equipo de soporte desde la entrega del anillo de compromiso en oro blanco son varias y quieres tener un gesto significativo y desearle toda la suerte en el amor al grupo completo, puedes solicitarle al encargado de los arreglos florales para boda que te haga las réplicas del ramo que sean necesarias y entregárselos antes del postre. Seguro que será un recuerdo para toda la vida e incluso podrás conservar uno para ti.
2. Conservando la tradición
La primera opción sobre qué hacer con el ramo de novia es la de continuar la costumbre y lanzarlo a las solteras del matrimonio que formadas en fila y vistiendo sus vestidos elegantes de fiesta, esperarán la suerte, según el augurio de alcanzar el ramo y ser las siguientes en casarse.
3. Amigas del alma
Otra costumbre igualmente frecuente y muy significativa, es entregarlo luego de la cena, a una hermana, familiar o amiga más cercana. Comúnmente es tu dama de honor y seguro fue una de las que con mayor entusiasmo y amor te ayudó con todos los detalles de la decoración de salón para matrimonio.
4. Entrega especial
El ramo puede ser un regalo hermoso para algún familiar o amigo cercano que por alguna razón de peso no haya podido asistir a tu boda. Acompañado tarjeta con una frase de amor corta en la que expresas tu agradecimiento, será un detalle inolvidable y otra forma de saber qué hacer con el ramo de novia.
5. Acto simbólico
Si eres muy religiosa, tienes un santo de devoción o quieres agradecer porque has tenido la boda soñada, puedes ofrecer tu ramo luego de la ceremonia a la misma iglesia donde te casaste o al día siguiente, al santuario de tu preferencia. Y si tu futuro esposo o tú tienen un ser querido que ahora los acompaña desde el cielo, un gesto que le permitirá sentirlo más cerca es llevarle el ramo al cementerio, el día después del matrimonio.
6. Aroma que perdura
Nuestra última recomendación sobre qué hacer con el ramo de novia es que, si quieres conservar las flores, pero no necesariamente en su forma original, puedes disecarlas, deshidratándolas dentro de un libro o atrás del calentador de agua y convertirlas en un cuadro de pared o en popurrí de flores secas con gotas de aroma para perfumar tu nuevo hogar.
7. Un recuerdo para siempre
Si definitivamente quieres conservar tu ramo y hacerlo parte de tus recuerdos de la boda, puedes inmortalizarlo con distintas técnicas como la liofilización, un proceso de deshidratación para conservar elementos. Este método mantendrá el aspecto natural de las flores por años por medio de la aplicación de resinas, o la protección dentro de una urna de cristal en la que conservará su forma, deteniendo el marchitamiento.
Tu ramo, además de tu peinado de novia, es uno de los accesorios más personales e íntimos que te acompañarán en el día de tu matrimonio, por esto debes sentirte en total libertad para decidir qué quieres hacer con él luego de la ceremonia, regalarlo o conservarlo y encontrarlo a la vuelta de tu luna de miel.