Ramo de novia: técnicas para convertirlo en un bello recuerdo
Representa belleza, felicidad y ha sido elaborado con el mayor cariño y totalmente a tu gusto, si deseas conservarlo como un hermoso recuerdo, estas técnicas te ayudarán.
Aparte del anillo de compromiso es el ramo de la novia uno de los complementos más hermosos y simbólicos del ajuar de boda. Sin embargo, por estar elaborado en flores naturales, es el más delicado y difícil de conservar en el tiempo.
La tradición del ramo se mantiene desde la antigüedad. En Roma y Grecia tanto el novio como la novia lucían collares de flores pidiendo a los dioses fertilidad y en señal de entregarse a la nueva vida con esperanza. Actualmente el ramo alegra el vestido de novia, lo llena de vida, color y, por lo general, está hecho con sus flores preferidas o las que guardan un significado especial, es por esto que muchas eligen conservarlo convirtiéndolo en un recuerdo para toda la vida del día en el que intercambian las argollas de matrimonio con el ser amado.
Aunque hay expertos floristas especializados en el tema de “inmortalizar” las flores, te compartimos unas técnicas muy sencillas que puedes realizar en casa para que seas tú misma la que le das un nuevo aspecto al ramo que será testigo de la unión con el amor de tu vida.
Refrigerar el ramo
Lo primero que debes saber es que para conservar las flores y lograr una bonita apariencia de tu ramo o de alguno de los arreglos que haga parte de la decoración de iglesia para matrimonio y que quieras que perdure en el tiempo, no puedes dejarlo olvidado sino que debes comenzar el proceso desde el día siguiente a la boda.
Un truco que te ayudará mientras decides en qué tipo de arreglo o recuerdo quieres convertir tu ramo, es conservarlo en la nevera sin envolverlo en nada. Solo cuida que no quede cerca de ningún alimento de olor fuerte o que pueda manchar tus flores.
Deshidratar las flores
Una de la técnicas más frecuentes y sencillas es deshidratar el ramo de novia o alguno de los arreglos de la decoración de salón para matrimonio hasta obtener uno de flores secas. Solo necesitas encontrar un lugar oscuro, con poca humedad en el que puedas colgar tu ramo completo boca abajo. Puedes ubicarlo en un armario, en un baño que no uses, al lado del calentador de agua o detrás de la nevera. Estos dos últimos harán además que las flores reciban algo de calor y se sequen completamente en menor tiempo.
Luego de que estén secas y para evitar que se quiebren o maltraten los pétalos, puedes rociarlas con laca para pelo o barniz de muebles en aerosol. Esto además les dará un toque brillante y un olor agradable.
Conservar en glicerina
Esta alternativa con glicerina te permite conservar las flores tanto de tu ramo como de los centros de mesa para boda con algo de flexibilidad, un color más vivo y un delicioso aroma. Necesitas glicerina líquida que puedes conseguirla en cualquier tienda de manualidades.
Comienza el proceso retirando los pétalos y las hojas que estén amarillas o algo marchitas. Corta un poco el extremo de los tallos y aplasta, con ayuda de un martillo, 5 cm del mismo por encima de la punta cortada.
En un frasco o florero de vidrio pon la glicerina calculando que cubrirá todo el extremo aplastado del tallo. Ponla a calentar a 60ºC en microondas u horno convencional. Si prefieres puedes calentar la glicerina en un recipiente de peltre en la estufa y luego con cuidado depositarla en el florero.
Introduce el ramo en el florero y déjalo por tres semanas. Pasado este tiempo, sumerge las flores también en glicerina caliente dejándolas hasta que notes un cambio de color por un tono más sombrío, oscurecimiento de las venas y que no haya signos de fragilidad en los pétalos.
Secar sobre una superficie plana
Una técnica milenaria y conocida por todos para conservar las flores, es secarlas al interior de un objeto plano que sirva de prensa, como una revista o un libro. Lo que debes hacer es desbaratar tu ramo, poner las flores separadas entre las hojas del libro, la revista o bloc, usar un objeto pesado sobre ellas y esperar un par de semanas. Obtendrás flores secas y planas, ideales para decorar papel reciclado, hacer un collage, incluirlas en el álbum fotográfico en compañía del modelo de tarjeta de invitación para recordar todos los detalles de la boda o para hacer un cuadro con ellas.
Preservar en Gel de Sílice
¿Recuerdas esa bolsita de sílica gel que viene en los bolsos nuevos? Bueno pues ese mineral llamado gel de sílice es un desecante, es decir, una sustancia que tiene la tarea de atrapar la humedad.
Para realizar esta técnica debes poner una capa de cristales de sílice, este puedes conseguirlo en floristerías y tiendas de manualidades, en un recipiente apto para microondas. Calienta la capa por 3 minutos para que esté totalmente seca. Vierte los cristales calientes en un vaso o frasco de vidrio hasta una altura de 3cm. Calcula que en el ancho del recipiente quepa la flor que quieres secar.
Corta los tallos de las flores de tu ramo de manera que queden con altura máxima de 3 cm. Ubica cada flor en un frasco con cristales de manera que la flor quede hacia arriba. Vierte con cuidado el resto de los cristales tibios sobre la flor para que quede cubierta. Pon el frasco o vaso en el microondas, gradúalo a temperatura alta y calienta las flores. Para las flores en botón o más pequeñas necesitas 1 minuto y medio. Para las más grandes requieren de 4 a 5 minutos.
Deja enfriar las flores y retíralas de los frascos con cuidado. Usa un pincel para quitar cualquier impureza y rocía con acrílico en aerosol. Obtendrás flores perfectas para realizar algún objeto decorativo o manualidad.
Cubrir con arena
Siguiendo la misma técnica del gel de sílice puedes conservar las flores de tu ramo de novia y cualquier adorno floral de la decoración de matrimonio sencilla que quieras conservar usando arena. Esta puedes conseguirla en viveros, ferreterías o tomarla de la naturaleza teniendo precaución de lavarla muy bien y secarla en el horno para que no tenga nada de humedad.
Necesitas además una caja de cartón pequeña, puede ser de zapatos o similar. Hazle en el fondo unos agujeros pequeños y luego cubre toda la base de la caja con papel periódico o de cocina. Lo mejor es que el papel tape los lados de la caja dejando suficiente cantidad de donde sujetarlo cuando el proceso de secado haya terminado.
Vierte la arena sobre el papel, llenando la caja hasta una altura aproximada de 1,5 cm. Deposita las flores completas, incluidos los tallos y esparce arena hasta cubrirlas. Deja que se sequen. Guarda por un periodo de una semana a 10 días, transcurrido ese tiempo debes revisar que hayan secado bien antes de continuar.
Con mucho cuidado, hala el papel hacia afuera por un lado de la caja. Hazlo sobre un recipiente o fuera de casa para dejar que la arena pase a través de los agujeros que hiciste al principio. No intentes sacar las flores secas hasta antes de que ya no quede nada de arena porque al hacerlo las puedes destruir. ¡Recuerda que son muy delicadas!
Puedes elegir el método que te parezca más sencillo y con el que conserves el aspecto que quieres del arreglo floral para boda mas significativo de todos. Deja volar tu imaginación y diseña un hermoso arreglo para que decores tu hogar. Evocarás todas las sensaciones, la decoración para matrimonio y los momentos de lo que significó su celebración.