¿Velo largo o velo corto?
Quieres llevar velo en tu boda pero aún no te decides si largo o corto. Aquí te contamos todo lo que debes saber para que tomes tu decisión.
Después del vestido, el velo es uno de los accesorios del ajuar de novia que más define el estilo que quieres lucir. Anteriormente se consideraba que el velo protegía a la mujer que iba a casarse de envidias o malas energías. En la actualidad es una elección que depende del gusto, la personalidad de cada novia y el tipo y lugar donde vaya a celebrarse la unión, pues esto te ayudará a determinar que estilo es el adecuado.
Velos cortos
Se consideran así los velos que no pasan de la altura de los hombros y dependiendo de la novia pueden extenderse tanto atrás como adelante ocultando levemente ojos y nariz.
Estos velos son ideales para matrimonios civiles o bodas menos formales en las que no va a guardarse un protocolo ajustado.
Pueden usarse tanto con vestidos largos, sin cola, como en vestidos altura Channel o cortos. Es importante tener en cuenta que combinan mejor con atuendos sencillos de poco vuelo.
En general estos velos son elaborados en tul, redecilla o géneros transparente pero menos fluidos pues permiten jugar con la forma y acomodarse de maneras caprichosas simulando un tocado.
Es común que los velos cortos estén complementados por sombreros pequeños de inspiración vintage recreando la belle époque, o cerrando la cara en forma jaula sujetándose hacia atrás con una peineta o un arreglo floral.
Otra tendencia que se está imponiendo en las últimas colecciones de la moda nupcial, son los velos cortos tipo antifaz. Como su nombre lo indica son franjas de transparencia que se ubican a la altura de los ojos sostenidos por una diadema ya sea de flores o brillantes. Este tipo de velo es muy recomendado para estilos de vestido sobrios, delicados y de falda corta.
Velo Mediano
Si quieres un velo con más presencia que el pequeño pero más cómodo que el largo, las opciones de velo mediano son ideales para ti. Puedes elegir entre el que alcanza la rodilla o el que llega a la altura del brazo.
Los velos de largo medio son una opción muy chic, que recuerda un poco a épocas pasadas, y funcionan con un amplio rango de trajes de novia, además pueden llevarse tanto en ceremonias religiosas en el día y hasta media tarde como en ceremonias civiles.
Velo largo
Si tu sueño ha sido siempre el casarse como en un cuento de hadas y el modelo de tu vestido es bordado, recamado con prendería y de falda muy amplia, nuestra recomendación es que complementes con un hermoso velo largo que termine de darle forma a una noche de fantasía.
Los velos largos tipo capilla o catedral cubren el rostro de frente a barbilla y su largo se extiende hasta los tobillos o incluso se arrastra, son indicados en ceremonias formales, que obedecen a la tradición y ampliamente usados en ceremonias religiosas en la noche.
Por lo general estos velos son retirados luego de la ceremonia para que la novia pueda desplazarse sin incomodidad al momento de la fiesta. Pueden ser reemplazados por un tocado sencillo de flores, una peineta o simplemente el peinado elegido.
Otra manera de llevar velo largo es usar un modelo que, sin cubrir el rostro, vaya en delicado equilibrio con el peinado, ya sea sujetándolo por encima o por debajo del cabello, fluyendo suavemente por la espalda. También puede llevarse desde la mitad de la cabeza ajustado por una tiara o una diadema de flores o pedrería.
