El matrimonio de Cesar y Johanna en Cartago, Valle del Cauca

La crónica de nuestro matrimonio

Fue el día más anhelado de mi vida porque Dios hace de lo imposible lo posible. Siempre fue un día tan soñado, ya que todo fue programado, cada detalle, cada letrero, cada rincón del salón donde se celebró y en la Iglesia, todo fue un sueño.

Mi vida ha cambiado por completo desde ese momento, mi corazón, la forma de mirarnos, de hablarnos, ahora es diferente, son miradas de amor. Dios toca a las personas en el momento que es, no debemos forzar las personas o las cosas, solo pedirle a Dios, y de rodillas, ante la virgen, y ella actúa en el corazón de ellos siempre...

Por primera vez lloré de felicidad, es algo tan mágico que todos debemos cumplir este sueño y entregarnos a Dios cuando nos llama. Las fotos hablan por sí solas. fue el mejor día de mi vida.