El matrimonio de Daniel y Andrea en Santa Marta, Magdalena

La crónica de nuestro matrimonio

Es una experiencia única e inigualable. Ese día es mágico, hermoso, te despiertas con el deseo de que todo salga super bien. Los nervios llegan en el momento que miras las manecillas del reloj y te das cuenta que se acerca la hora más esperada.

Con la llegada de tu estilista, del fotógrafo, de las personas del video los nervios y la alegría son enormes, el afán de colocarse ese vestido tan hermoso y anhelado. Llega la salida del hotel, las cámaras, las personas en el hotel aplauden y dicen que hermosa novia.

Más sorprendente fue cuando salgo y veo ese carro espectacularmente adornado y moderno. Me impactó mi llegada a la capilla, fue un sueño con esa vista al mar la decoración de mi capilla era romántica y suave.

Entré muy nerviosa y ansiosa de tener a mi lado al hombre de mis sueños, recibimos la eucaristía con mucha concentración y con la mejor vista del mundo todo el mar era el paisaje más lindo que pude ver en mi vida el mejor día de mi vida con el hombre de mi vida que más quería pedir.