El matrimonio de Diego y Alejandra en Villavicencio, Meta
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17 Dic, 2016La crónica de nuestro matrimonio
El 17 de diciembre del 2016, fue el día más esperado de mi vida
Todo empezó con la pedida de mano en una celebración familiar, lo que era una fiesta sorpresa de cumpleaños para mi novio terminó siendo el escenario para pedir mi mano delante de mis padres y más familia.
Mi suegra me dijo que le hiciéramos una fiesta sorpresa a él, idea que me pareció genial y avise a la familia para invitarla, lo que yo no sabía era que la sorpresa era para mí, debido a que él sabía de su fiesta y simplemente era la excusa para estar todos reunidos y poder pedir mi mano delante de nuestros padres y hacer público nuestro compromiso.
Compartimos la cena, palabras de nuestros padres, música y luego de la torta, mi novio se puso de pie para dar gracias a todos por haber estado en su reunión de cumpleaños, hasta ese momento yo no tenía ni la más mínima idea que la sorpresa era para mí, luego de eso, se dirigió a mí, se arrodilló y sacó el anillo, fue algo totalmente mágico porque jamás creí que lo hiciera delante de tanta gente. Eso fue el 26 de agosto del 2016.
Seguir leyendo »Luego de eso supimos que había mucho por hacer y poco tiempo debido a que pusimos la fecha del 17 de diciembre del mismo año (2016) lo primero fue descargar la aplicación matrimonio.com para poder tener orden en todas y cada una de las cosas y detalles.
Empezamos definiendo qué clase de boda sería y la cantidad de invitados, empezamos a ver haciendas y fincas en la ciudad de nuestros padres (Villavicencio) y encontramos una muy especial con lo que queríamos y con alojamiento para algunos de los invitados que venían de varias ciudades.
Mi madre me acompañó en la travesía de encontrar el vestido perfecto así que antes de ir a medirme los diseños, compramos muchas revistas y veíamos algunos diseños en internet para tener una idea de lo que si quería y lo que definitivamente no quería ver ni en pintura,
Luego mi novio, mi mamá mi suegra y yo, buscamos el decorador para coordinar el estilo de nuestra boda y el tipo de decoración.
Buscamos un muy buen fotógrafo de esa ciudad quien semanas antes del gran día, nos hizo una sesión de pre-boda en una casa campestre a las afueras de Villavicencio, la idea era que esas fotos de la pre-boda decorarían el salón de la recepción.
Iniciamos los ensayos de la corte, estos eran los niños que nos acompañaban con calle de honor en la iglesia y con quienes ensayamos dos coreografías para el vals en la recepción.
Además de esos dos vals, mi novio y yo escogimos la canción de il divo "hasta mi final" para bailarla en ese día.
Otra de las cosas que mostramos en la recepción fue un video hecho por el mismo fotógrafo y editor. El lo realizó con todos los videos hechos por nosotros en los viajes y actividades nuestras, eso les encantó a los invitados.
Buscamos una persona experta en los pasabocas, encontramos un taller de repostería que nos preparó distintos snacks entre salados y dulces para el gusto de todos los invitados.
La comida fue típica de la región al estilo gourmet, también contamos con una persona experta en el tema de alta cocina.
Los anillos los elegimos los dos una tarde de sábado con una idea clara ya que habíamos visto muchos en las páginas de internet.
Mi estilista me peinó con ondas sueltas y una tiara muy delicada, días atrás habíamos hecho ensayo de peinado y maquillaje, en ese mismo salón. Peinaron y maquillaron a mi mamá, mi cuñada que era mi dama y mi suegra. Algo que me quedó como anécdota es que me casé sin aretes, resulta que mi estilista me peinó y me maquilló las demás ya estaban listas, llegó la asesora del vestido y cuando me paré para que me vistieran me pusieron la mantilla, la liga, los zapatos y cuando estuve lista mi mamá me abrazó me entregaron el bouquet y me subieron al carro, pero nunca caí en cuenta que no me puse los aretes, tiempo después viendo las fotos note que no tenía aretes, lo lamenté pero bueno fue algo que quedo de recuerdo.
Algo que siempre nos gusta tener es recuerdos de todo lo que hacemos por eso para la boda contamos con dos fotógrafos, un luminotécnico y otra persona de la misma empresa encargado de hacer el video de toda la boda, desde la iglesia hasta la hora loca en la recepción.
Fue un día perfecto y espectacular, la noche de bodas, nos quedamos en un hotel campestre tranquilo y alejado de la ciudad, un día antes del matrimonio habíamos dejado las maletas de la luna de miel listas.
Cuando llegamos a la iglesia mi papá estaba muy nervioso que hasta olvidó el ensayo que se hizo antes de la boda, para la entrada de la novia pero pudo más su alegría y luego todo fluyó.
Fue un día perfecto y especial, a pesar de los días de estrés consiguiendo todos los detalles y eligiendo todo a la perfección y a veces el pánico que daba no estar perfecta para el vestido, puedo decirles a las novias que me están leyendo que disfruten al máximo cada detalle. Que se gocen cada cosa, cada ensayo, cada prueba que al final todo resulta como lo pensamos, o inclusive mucho mejor que la expectativas.
Ah y otro consejo, luego de haber elegido el vestido perfecto, no busquen en páginas, ni vean revistas ni visiten otras tiendas, si lo elegiste ese es y no hay discusión.
¡Saludos y disfruten, es tu día y tú eres la princesa de la historia!
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