El matrimonio de Jaime y Liliana en Bogotá, Bogotá DC

La crónica de nuestro matrimonio

Nuestro matrimonio fue increíble. Disfrutamos cada detalle desde la planificación hasta ese día.

Íbamos preparados para no estresarnos ni molestarnos si algo salía diferente a lo planeado.

Pese a que hubo errores como que el maestro de ceremonia se equivocó con los nombres en el vals o la ventilación del salón, sabíamos que ese era nuestro día y lo debíamos disfrutar al máximo.

Lo importante de ese día es vivirlo plenamente porque se pasa muy rápido y después de la boda trabajar para que la realidad sea tan maravillosa como el sueño de ese día.

Bailar, sonreír y disfrutar desde que nos vestimos, peinado y maquillaje, la misa, las fotos a la luz del día en la iglesia en el prado al aire libre, los globos de helio y luego la ceremonia en la noche, nuestra coreografía, nuestro baile, la comida, la rumba, la rifa del ramo y liga, el brindis, todo fue increíble.

Casarse es una experiencia única que hay que vivir y disfrutar plenamente.

Feliz día a todos.