El matrimonio de Jorge y Melisa en Barranquilla, Atlántico

La crónica de nuestro matrimonio

¡El días más Feliz!

Gracias Dios, mil gracias, primeramente a él, que permite todas las cosas, vi su ayuda en cada detalle de mi matrimonio, le pedí mucho a Dios por este día y fue maravilloso.

La verdad ese día estuve muy tranquila, sobre mi reinaba, era una sonrisa que aun la tengo porque llegó mi gran día, ¡qué Felicidad!, cuando sonó la marcha se aceleró un poco mi corazón, sentí nervios cuando la ceremonia como tal empezaba. ¡Dios! llegó el momento, ¡un día único y especial!.

Gracias a mis padres, mi familia y muchos amigos, los proveedores que ayudaron a que este día fuese hermoso. ¡Muchas gracias!.

Es un día que no se olvida, todo salió como lo planeé, en Septiembre llueve mucho en mi ciudad, pero gracias a Dios ese día salió el sol.

Mi corazón está lleno de agradecimiento y muy feliz de haber realizado uno de los proyectos más importantes y transcendentales de la vida.

¡Gracias Dios!