El matrimonio de Vladimir y María Cristina en Santa Marta, Magdalena

La crónica de nuestro matrimonio

Fue un sueño hecho realidad. Todo lucía hermoso, no tuve que preocuparme por mayores cosas, ya que nuestro wedding planner se ocupó de todo, sólo me preocupé por lucir inolvidable ese día.

Lamentablemente, no alcancé a peinarme como quería porque pasaron las horas y aunque todo estaba listo, me retrasé y no alcanzamos hacer lo que se había pensado para el peinado, puesto que no quería perderme la puesta de sol, una vez arreglada como mejor pude, llegué al lugar de la ceremonia, solo bajando unas largas escaleras, con muchos nervios pero muy feliz de ver todo tan bello, la decoración con tonos rosa como mi vestido, mi novio, allá expectante y emocionado al verme avanzar hacia el de brazo de mi padre quien no pudo dirigirle palabra de tanta emoción. Mi canción de entrada fue la marcha nupcial y Alelujah instrumental, fue muy emotivo para todos quienes nos acompañaron.

Hicimos nuestros propios votos y todo fue maravilloso. Luego del gran beso, todo siguió siendo mágico, y nos sentíamos más felices que nunca. Puedo decir, que mi boda fue tal cual la soñé, excepto por el peinado claro!