Demasiados errores juntos - cero autocrítica
En términos generales la boda y el evento salieron bien y recibimos comentarios positivos de los invitados. Sin embargo, hubo cosas que no salieron de acuerdo a lo planeado.
Vamos a dividir este mensaje por partes, para que nos sea más fácil abordar los diferentes temas.
1. La decoración: ¡Quedó muy linda! Las flores se veían muy bonitas y los arreglos tanto del salón como de la Iglesia quedaron simplemente geniales. ¡Muchas gracias!
2. La comida: ¡Definitivamente ese chef es un campeón! La comida le quedó deliciosa. Los jugos, entradas, platos fuertes... todo quedó muy muy rico.
Acá tal vez tenemos dos comentarios, pero relacionados con la servida: primero, no debían hacer cambios en los platos... nosotros les habíamos preguntado de antemano a los invitados quiénes tenían una dieta especial y sólo respondieron los vegetarianos que teníamos identificados. A los demás no debía hacérseles cambios (eso fue decisión de ustedes que desencadenó en un poco de desorden. Pero si nos hubieran preguntado les habríamos dicho que no). Lo segundo fue con los tiempos de la servida: el caldo lo sirvieron durante una de las tandas de la orquesta... entonces perdimos tiempo de orquesta con los invitados sentados (era preferible perder tiempo del DJ, porque la orquesta es más costosa).
3. El fotógrafo: ¡Hay muchas fotos muy bonitas! Sin embargo hay fotos en momentos claves que no quedaron bien (a pesar que Carlos revisaba en el instante), o que simplemente no quedaron capturados en foto: por ejemplo, no tenemos una foto con todos los invitados al tiempo; no hay una foto con nuestros papás en la mesa principal; no hay foto bonita con nuestros papás y padrinos en la iglesia; no hay fotos con los invitados en las mesas; no hay fotos de la “hora loca”; no hay fotos de los trencitos, limbos, círculos y demás momentos geniales durante la rumba; no hay fotos de la rifa del ramo.
La verdad nos parece mal que Carlos se haya ido a las 7:30pm, porque lo que contratamos con ustedes era el fotógrafo para todo el evento (hasta las 11pm). Él se acercó a preguntarme cómo íbamos y si todo estaba bien mientras estábamos bailando. Yo le dije que sí, pero no significaba que se podía ir. Igual, nosotros hicimos todo con ustedes (Bendita Boda), entonces ningún proveedor debería preguntarnos ese tipo de cosas a nosotros, que estamos en otro rollo, eso es directamente con ustedes, que son los wedding planners.
4. Grupo ceremonia: ¡El grupo sonó muy bien! (salvo la última canción). La cantante tiene una voz muy bonita, el pianista tocó muy bien y el violín sonó muy lindo... lo único es que ese no fue el grupo que contratamos. Nosotros habíamos dicho que queríamos el grupo que Laura nos había mostrado. Sin embargo al llegar a la iglesia vimos que era otro grupo. Ese cambio es un riesgo que se asumió innecesariamente, y no nos queda claro quién tomó esa decisión (si fue Juan Carlos o Bendita Boda).
5. El DJ: Durante el cóctel estuvo bien la música. Terrible que hayan dicho mal el nombre del novio a nuestra entrada al salón. Yonathan nos dijo que fue su error, pero ese error es imperdonable. Yo (Diego) me presenté con el DJ antes del evento. En todas las tarjetas de las mesas decía Ingrid y Diego. No hay excusas para que hayan dicho “Ingrid y Carlos”. La verdad estaba con toda la actitud de no dejar que nada nos amargara la noche, pero ese error impidió que pudiéramos tener el vídeo de nuestra entrada. Nos dañaron la posibilidad de tener ese recuerdo bonito en vídeo.
Nosotros le enviamos a Laura el tipo de repertorio que queríamos que pusiera el DJ - no queríamos reggeaton o electrónica, queríamos sólo salsa y merengue para la tanda normal, y pedimos que pusiera una tanda de desorden (de acuerdo con el repertorio que nos habían enviado). Esa tanda de desorden no existió. Y hubo reggeaton y electrónica.
6. La orquesta: Lamentablemente en este punto no tenemos muchos comentarios positivos (por no decir ninguno). Antes de iniciar me acerqué (Diego - novio) a preguntarle a Juan Carlos si tenían la primera canción o no, porque ya había cuadrado con el DJ para que la pusiera en caso que no la tuvieran; Juan Carlos me aseguró que la tenían perfecta. Luego hablé con el Director de la orquesta para preguntarle lo mismo, y me dijo que no me preocupara, que todo estaba solucionado. Finalmente hablé con el cantante para asegurarme que estuviera seguro y que sí pudiera dar las notas (porque sé que esa canción es bastante exigente), y me dijo que la tenían al 100%.
La verdad esa canción salió fatal. No podía haber salido peor. Me daban ganas de decirles que pararan y se callaran y seguir sólo con el DJ. Honestamente, si no la tenían lista, debieron ser lo suficientemente profesionales como para reconocerlo y aceptar mi sugerencia de hacerla con DJ. Era la primera canción, nuestro primer baile como esposos, y al igual que la entrada, no podemos tener un recuerdo bonito de ese momento en vídeo porque la orquesta no dio la talla y el cantante no llegó a las notas.
Ahora, me parece terrible que hayan cuadrado sonido con los invitados en el salón. Acaso ¿a qué horas llegaron? El sonido siempre se debe cuadrar antes de cualquier evento. Y sí, estaban cuadrando sonido. De hecho se acercaron a preguntarme si podían cuadrar sonido con un son antes de tocar la primera canción. En ese momento no tenía otra opción que decirles que sí, pero ese no es el momento de hacer eso. Eso es falta total de profesionalismo (y se los digo con total conocimiento del tema, y con más de 20 años de experiencia como músico profesional). No sé quién es el responsable de eso, pero si estuviera en mis manos jamás volvería a contratarlos. Y a pesar de eso, el sonido estuvo fatal durante toda la primera tanda. Los parlantes del lado de la mesa principal estaban mal conectados (o el cable estaba dañado), estaba distorsionando y toteando aleatoriamente y los micrófonos estaban haciendo feedback (por eso es que se cuadra sonido antes y no durante).
Adicionalmente, nosotros contratamos tres salidas de orquesta e hicieron dos. La orquesta debía hacer la hora loca (con temática colombiana); lo único que hubo de hora loca fueron las cosas que compramos y que se repartieron, pero nunca hubo una instrucción, una frase, algo por parte de la orquesta, que organizara ese momento. Simplemente fue un momento más y ya.
Nosotros enviamos un listado de canciones que queríamos que tocara la orquesta (canciones que ya se encontraban en su repertorio para su comodidad), pero en la segunda tanda tocaron canciones que no habíamos pedido... y en ambas tandas hicieron pausas demasiado largas entre canción y canción... desde mi experiencia les puedo decir que eso es claro reflejo de no tener preparada la lista y el orden de canciones a tocar.
Desde un principio se pidió un formato específico de la orquesta (por formato me refiero a qué instrumentos queríamos en vivo y qué debía ir secuenciado); durante las dos tandas se notó que no lo prepararon. Muchas canciones sonaron sin la percusión secuenciada (por ejemplo las de Fruko), sin instrumentos de apoyo (las de Rikarena), por poner unos ejemplos; sin embargo en todas las canciones faltaron timbales, percusión menor y vientos adicionales (los cuales debían ir secuenciados, de acuerdo con lo hablado en el momento de la audición).
En conclusión, en los tres elementos de música (grupo ceremonia, DJ y orquesta) hubo cambios, errores graves, falta de concentración/preparación, pero sobre todo, no fue lo que se contrató ni acordó. No sabemos quién hizo los cambios o quién es el directo responsable de todo esto, pero se notó demasiada improvisación. Y era nuestro matrimonio. No es un cumpleaños, que se repite cada año.
7. El ponqué: ¡Los ponqués se veían muy bonitos decorados!
Sin embargo, no nos gustó un detalle: desde el principio dijimos que queríamos ponqué de chocolate. A pesar de esto, al llegar a la prueba de los sabores, solo había uno de masa de chocolate (amargo) con crema de café. Luego de mucha insistencia (y de negativas iniciales de la pastelera), logramos que accediera a hacer un ponqué más acorde a lo que queríamos, pero igual nos tocó arriesgarnos a probarlo hasta el día de la boda. Eso no debía haber pasado. Si nosotros queríamos pastel de chocolate, lo mínimo era tener 3 o 4 opciones de pasteles de chocolate. No nos gustó tener que acomodarnos a lo que le pareciera a los demás, en vez de lo que habíamos pedido desde el principio.
8. La atención del staff y meseros: ¡10 puntos para ellos! Todo el tiempo estuvieron con una sonrisa, muy atentos, diligentes y amables! Realmente nos parecieron muy lindos y especiales y nos hicieron sentir muy bien!
Y finalmente, a nivel personal estamos muy agradecidos con la actitud tanto de Laura como de Yonathan durante el evento. Muchas gracias por poner su corazón y empeño en sacar las cosas adelante. Sé que organizar eventos no es fácil, y que obviamente nunca va a haber el evento perfecto; sin embargo todas las cosas que les mencionamos acá eran perfectamente evitables.